23/3/09

PROFESIONALES DE LA MENTIRA

A través del artículo anterior tuvimos la ocasión de compartir una reflexión en la cual se exponía la necesidad de mover la Verdad, de no ser simples conocedores sino dar un paso al frente para posicionarnos como auténticos develadores de la Verdad.
Develar significa literalmente quitar o descorrer el velo que cubre algo, nos informa la Academia. Por tanto, el primer gesto práctico de una persona empeñada en que la Verdad sea compartida por todos, es retirar el velo con el que la han tapado.
He podido comprobar, desde la atalaya de mi más de medio siglo de vida, estudios, experiencia y observación, que tanto los que viven de la res publica como de la res credendi conocen la verdad histórica de su área y competencia, el origen y desarrollo de lo que hablan y predican, e incluso cuando hacen cátedra de ella, casi siempre intentan mostrar y enseñar a sus pupilos la verdad. Aunque siempre, revolotea sobre ellos el miedo a ser sancionados con la retirada de licencia de cátedra.
También, hemos de tener en cuenta que el hecho de explicar la verdad de forma light, se origina ante la posibilidad de crear enfrentamientos con las facciones de pupilos ortodoxos, -que más que pupilos se comportan como portadores de sables de la ortodoxia en forma de magia de inexorable cumplimiento-, en tanto que los no ortodoxos no lo defienden por temor a que el Alto Vigilante no lo incluya en sus listas o bien no lo llame a la nomina de sus profesionales de la otra vida.
Sea una u otra la razón que pueda esgrimir quien no explica la Verdad en estado puro, origina con su comportamiento un cuerpo doctrinal incierto en ese momento y cuando el pupilo sea ya un profesional disfrutante de la res publica o de la res credendi.
Y así es como se pone en marcha un efecto de bola de nieve, que cuando llega a su destino final congela literalmente a quien lo pregonó -por ser conocedor de la mentira o verdad no develada que encierra la cátedra que dió- y calienta el cerebelo de quien lo estudia, recibe, transmite y hace fe de ello.
He aquí la primera camada de monstruos.
Uno de los métodos más usuales que se usan para no develar la Verdad es introducirla en formol, archivarla en un instituto o biblioteca, transcribirla como documento cuasi inteligible para quienes no hayan adquirido el arcano del lenguaje críptico de la polis o el dogma y establecer una auténtica carrera de obstaculos para el estudioso que quiera acceder al bien común y público de los fondos celosamente guardados.
Otra observación que he podido cotejar es que la razón dada por quien conoce la Verdad y se la guarda solo para sí y para sus sucesores, es que no es conveniente comunicarla en su forma pura, sino interpretada, tamizada y pulida para que no crispe a la opinión pública o se incumpla el precepto de la caridad y la misericordia por el escándalo que pueda provocar.
He aquí la segunda camada de monstruos.
Este comportamiento descrito, se denomina sencillamente engaño. Engaño multisecular. Y fraude cuando además de ello, se propone la caridad y la misericordia como falsa coartada para no develar la verdad.
Todo ello origina un problema grave, al perder la Verdad su sentido original, de manera que ya no puede reconocerse ni la persona, ni el momento histórico del que se habla y aún menos reconocer sus enseñanzas.
Y he aquí la tercera camada de monstruos.
De estos monstruos, se nutren aquellos que se arrogan el deber extrahumano de recibir, conservar y entregar su verdad. Sin ellos. no podrian existir.
He aqui a los padres de todos los monstruos.
.

2 comentarios:

  1. La Verdad es el principio de la vida.
    La mentira continua que nos envuelve, consume como lento veneno destructor el espíritu de la bondad del hombre.
    La mentira continua que se nos impone es la causa de la debilidad, del abatimiento espiritual de la sociedad, sometida al esfuerzo de una lucha continua con su principio fundamental.
    La fuerza vital que nos mueve es la Verdad. Sólo la Verdad puede salvar al mundo. Sólo la Verdad es moral. Sólo la Verdad purifica. Sólo la Verdad nos hace libres.

    Enhorabuena por su blogsite

    ResponderEliminar
  2. Completamente de acuerdo, cuántas veces estos profesionales de la mentira son capaces de articular un complicado tejido de distorsión de la verdad, atando cabos para no implicarse en su mentira…para no dejar huellas…

    Para dar una voz a aquellas personas victimas de estos profesionales un grupo de personas, en una asociación sin ánimo de lucro hemos creado defiendase.es. Es un portal web para que todos aquellos que se vean indefensos porque sean víctimas de estos profesionales de la mentira. Si queréis entrar y participar, vuestra experiencia puede ayudar a mucha gente: www.defiendase.es

    ResponderEliminar